¿Te da miedo estar bien?

Estar bien es difícil.

Para algunas personas, el vivir sufriendo se ha vuelto tan cotidiano que no se han dado cuenta que no pueden visualizar un panorama estable y satisfactorio; inclusive, cuando se habla con ellos de alternativas pareciera que no existe si quiera el concepto de bienestar.

Las razones para que alguien se adapte a este “estilo” de vida doloroso, pueden ser varias, entre ellas: una historia plagada de conflictos, rasgos de personalidad depresivos o “masoquistas”, un ambiente no favorecedor al cambio, una falta de modelos de conducta positivos de quien aprender otra forma de experimentar la vida; sin embargo, uno de los factores que considero que están presentes en la mayoría de estas personas, es el miedo a aquel panorama prometedor pero sumamente desconocido.

El poner un fin a todo esto implica tratar de imaginar algo que, más allá de la simple fantasía, nunca vimos; y el miedo puede ser tan paralizante que nos lleva a preferir, de manera inconsciente, el sufrimiento, y allí, somos capaces de hacer todo lo que está en nuestras manos para aferrarnos al problema que ya conocemos.

Esa fuerza que ejercemos para no salir del conflicto, pudiera estar destinada para resolverlo, pero ello implica animarnos a nuevas experiencias, tanto en nuestro mundo interno como el externo.

Puede sonar cliché pero sí es necesario perderle miedo al cambio, ya que, independientemente de cómo resulten las cosas, será muy satisfactorio al menos haberlo intentado.

Lic. Florencia Bevilacqua

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