Frases como “al mal tiempo buena cara” o “más vale reír que lamentar” suelen ser mencionadas cuando alguien se encuentra en un momento difícil o, inclusive, nosotros mismos nos las hemos repetido cuando pasamos por algo complicado, buscando sentirnos mejor.
En estas ocasiones, donde evitamos decir (o enfrentar) lo que sentimos o pensamos, es probable que esto nos genere incomodidad, impotencia, intranquilidad o incluso, algunas veces, se desvaloriza el proceso que se está pasando, dejando de lado la situación existente. A su vez, esta misma imposibilidad de manifestar nuestros conflictos puede afectar en distintas áreas de nuestra vida, como la rutina de sueño, la alimentación, el trabajo, la escuela, etc.
Encontrar un espacio donde nos sintamos escuchados y comprendidos, dando pauta para abrir el diálogo ya sea con amigos, familia o algún especialista nos orienta al conocimiento de nuestras emociones y vulnerabilidades, siendo esta una vía para nuestra salud mental.
Cynthia González
Cynthia@psicologosmonterrey.com.mx