La psicoterapia infantil y adolescente es un medio por el cual el paciente y sus padres pueden entender y resolver conflictos internos y también de la relación familiar. Los niños son tan cercanos a los padres que es muy frecuente que existan conflictos que no se alcanzan a percibir; lograr cierta distancia para tener un punto de vista neutral, sumado al entrenamiento, es la función del psicoterapeuta infantil.

Las sesiones iniciales (4 a 6) están compuestas de entrevistas con el niño/adolescente, aplicación de pruebas psicológicas y entrevistas con los padres. Esta fase inicial tiene como finalidad encontrar las causas, los conflictos predominantes y las posibles recomendaciones. Éstas pueden o no incluir iniciar una psicoterapia.